viernes, 24 de agosto de 2012

Tú eres el trece de mi viernes.

No tienen ni idea de todos los infiernos que hemos superado, pero ¿sabes? Tampoco saben que hemos cruzado juntos los siete cielos.

Todos nuestros días son viernes-trece, y todos nuestros meses, enero(s).

martes, 7 de agosto de 2012

Quiero volver a ver esa sonrisa de idiota.

Después de millones de risas, de largas conversaciones, de abrazos infinitos, de miradas cruzadas, de "te quieros", de letras escritas en papel.. He empezado a creer en un "para siempre". Nunca lo había llegado a entender del todo, eso de dar por una persona hasta lo que no tienes, y sinceramente, mi propia intuición me dice que nunca jamás volveré a creer en ello. ¿Sentirte afortunado? No lo creo. Yo sólo me he enamorado de ti, y bueno, creo que el mundo es un poco menos malo porque existes. También quiero pasar el resto de mi vida contigo y cuidar de ti, y todo esto no sólo lo digo por esa canción "noviembre dulce".



Cualquier ser humano sobre el planeta que se encuentre tres folios llenos de frases, de palabras, de letras, escritas todas y cada una de ellas para ti, me arriesgaría a decir que se enamora (aún más) si la persona que te las escribe es la más importante en tu vida. Lo mejor de todo esto no son las miles de palabras escritas allí, si no darte cuenta de que esos papeles huelen a él. Y al analizar todo esto, caes en la cuenta de que estás loca. Por él. 

Unos increíbles dieciséis a tu lado, vamos a por los perfectos diecisiete.